Estimado Ander:
No nos conocemos, sin embargo esta semana he leído
la columna Miradas del domingo pasado
en Ciudad CCS que titulaste “La educación privada y su pertinencia” http://www.ciudadccs.info/2015/05/17/epalemiradas-6/ y como ucabista, trabajador abocado a lo social, pero sobretodo como venezolano
que apuesta al encuentro, me tomo el atrevimiento de escribirte estas líneas
como réplica, quizás sin tener la tribuna comunicacional que tú tienes, pero al
menos esperando que lleguen a ti.
Sinceramente creo que el relato de tu visita a la
UCAB lo tenías pre-elaborado antes de hacer las peripecias que nos cuentas. Te
hizo falta ir hasta la universidad solo para darle un matiz anecdótico a tu
historia. Si como reportero, periodista o simple curioso hubieses buscado mayor
objetividad para nutrir tu columna te hubieses dado cuenta de otra realidad y
hallazgos maravillosos que lamentablemente no mencionas. Siento además, que en
los duros momentos que vive nuestra Venezuela, tu pluma en nada ayuda a superar
los graves problemas que tenemos, sino que alimenta – además de forma poco
sensata – la división y la polarización.
Me duele tu columna pues conociendo y habiendo
trabajado por más de 16 años en los programas de extensión social de la UCAB
tengo que decirte que obviaste una realidad inmensa que tenías enfrente y te ha
podido invitar a sumar, más que a dividir. Tu relato comienza hablando del
vigilante de la universidad que no te dejó entrar, a ese que calificas como
“dios-señor-rey parado en el portal” ¿Sabes que la gran mayoría de esos
dioses-señores-reyes son gente de Antímano? Reclamas a estudiantes hablar despectivamente
de la gente, pero ¿tú comienzas tu artículo haciendo lo mismo? ¿Sabes que entre
los vigilantes de la UCAB hay muchos de tendencia oficialista pero con años de
servicio en esa casa de estudio? Esto sin mencionar que lamentablemente todas
las medidas de seguridad que se aplican ahora en cualquier lugar, son producto
de la galopante inseguridad en la cual estamos inmersos TODOS los venezolanos.
¿De quién es esa responsabilidad? Valdría la pena un buen artículo. O por otro
lado, con el mismo pretexto que usaste para entrar a La Católica – vale la pena
destacar que efectivamente entraste - ¿has tratado de entrar en el Hospital
Cardiológico Infantil? Échale pichón, usa la misma técnica y luego me
cuentas.
Foto cortesía de Ciudad CCS |
Apreciado Ander. Una de las cosas que más me llamó
la atención de tu artículo fue que publicaron una extraordinaria foto del
Centro de Salud Santa Inés UCAB con la Parroquia Antímano de fondo y ni
siquiera lo mencionaste. Esta obra, enmarcada en un gran proyecto llamado
Parque Social Padre Manuel Aguirre SJ, se creó para brindarle servicios a la
comunidad y servir de puente entre la academia y la sabiduría popular. ¿Sabías
que el Parque Social se construyó e inauguró antes de que Chávez llegara al
poder? ¿Sabías que la convicción de la UCAB por ajustar su pensum a la realidad
del país es previa a esta revolución?
Me hubiese encantado que entraras al Parque Social
y visitaras tanto el Centro de Salud Santa Inés UCAB como el resto de las
unidades que conforman este complejo. Aun siendo parte del campus de la
universidad, es un espacio abierto al público, así que eres totalmente
bienvenido. Yo, por ese sueño de seguir trabajando por este país quise ampliar
mis horizontes y ahora me dedico a trabajar en zonas populares del Estado
Aragua, pero cuando quieras te acompaño a una visita a este Parque Social. Sus
visitantes y usuarios son fundamentalmente de las parroquias Antímano, La Vega,
Caricuao y Macarao, aunque ahora llega gente de todo el país. Allí hay asesoría
jurídica gratuita para la gente y se hace con estudiantes de la UCAB. ¿Sabías
que del SENIAT refieren a la gente más humilde allí? Prestamos también apoyo
psicológico, pedagógico, asesoría económica, voluntariado en distintas áreas,
todo enlazando un equipo profesional abocado a ello con estudiantes de la
universidad. Y no es para “contaminar a los chamos del barrio con filosofías
liberales” como mencionas, no mi pana, es para apoyar a la gente a resolver sus
problemas y además, enseñar a los estudiantes ucabistas la realidad de este
país.
El Parque Social UCAB visto desde la pasarela que lo comunica con la UCAB |
Del Centro de Salud Santa Inés UCAB podría
encadenarme escribiendo páginas y páginas, pues tuve la fortuna de ser su
director administrativo y luego director general desde que se fundó en 1999 hasta
hace muy poco. Nuestras memorias y
cuentas están a la luz pública pero te doy algunos datos. Sin ningún apoyo
del Estado cada año prestamos más de 115.000 servicios médicos de distinta
índoles, desde 28 especialidades médicas hasta servicios complejos como
tomografía, mamografía, rayos X, laboratorio. Nuestros datos te pueden hablar
que los primeros beneficiarios son esos que tú dices que “no nos quieren”. Pues
año a año, un 33% de nuestros pacientes son de Antímano. Luego sigue La Vega
20% y Caricuao 16%. Más bien la sorpresa es la cantidad de gente humilde que
nos llega de lugares como Güiria, Carúpano, San Félix, La Guajira por solo
comentarte con quienes yo he hablado personalmente, no “lo que me contaron”.
¿Sabes que el CSSI UCAB cuenta con un tomógrafo
nuevecito? Lamentablemente no encontramos recursos para financiarlo con apoyo
del gobierno. Ha sido la empresa privada, esa de la que hablas con tanto
desprecio, la que permitió su adquisición ¿Sabes de donde es la mayoría de los
pacientes que usan nuestro tomógrafo? Son niños con cáncer referidos del
Hospital de Niños JM de los Ríos y cuyo financiamiento lo asume otra fundación
privada sin fines de lucro abocada a tal enfermedad. Fíjate mi pana, te estoy
hablando de por lo menos 3 instituciones privadas – la que financia el equipo,
la que hace los estudios y la que paga parte del costo (porque cuesta y mucho)
– que no perciben utilidad alguna y que no hacen sino aliviarle parte de la carga
al Estado. Ander, hasta echar una mano en estos momentos se nos ha puesto
cuesta arriba y tú te mandas ese artículo cargado de malas intenciones cuando
esta vaina la echaremos pa´lante es entre todos. Si, este país nos exige que tú
y yo nos entendamos y que haya cabida para universidades públicas y privadas,
inversión pública y privada, así como también espacios para aquellos que
trabajamos desde las instituciones que no aspiran a lucro sino al bienestar de
la colectividad.
A ver, en CSSI también tenemos un servicio
diferenciado para adolescentes que busca prevenir el embarazo. Aparte de la
Maternidad Concepción Palacios, es el único servicio de esta naturaleza en el
oeste de la ciudad. Y esto lo hace una universidad que ni siquiera tiene facultad
de medicina. ¿Y sabes? este servicio cuesta, nos cuesta mucho, pero por
asesoría de órganos como el Fondo de Poblaciones de las Naciones Unidas UNPFA
nos enfocamos en hacerlo gratuito para el destinatario, pues es una barrera
importante en este caso. Ahora bien, gratuito no es que no cuesta, es que
debemos buscar financiamiento para hacerlo. Hace un par de años presentamos un proyecto
de financiamiento al BID, pero se quedó engavetado en el despacho del Ministro
de Planificación esperando el aval del gobierno nacional. Nuevamente, sumando
de a poquito entre conocidos, entre empresas privadas y a través de una campaña
llamada Amigo Solidario hemos podido mantener el programa con unos niveles de
éxito increíbles. Por cierto, tú también puedes ser un Amigo Solidario, es una
campaña que busca la suma de mucha gente que tiene la oportunidad de dar un
poquito para costear estudios de otros que tienen menos. Esto probablemente es
más cercano a ese socialismo que predican, realizado de manera callada sin la
exposición publicitaria en vallas que solo queda en palabras. Esto es en serio
y basta con hablar con alguno de nuestros pacientes para darte cuenta.
Mira, en el Centro de Salud Santa Inés y en la UCAB
efectivamente cobramos. Si mi pana, aquí no hay subsidios, pero al vigilante de
la entrada, ya sea de Antímano o Caricuao, oficialista o no, hay que pagarle
cada quincena, al igual que a profesores, médicos, enfermeras, recepcionistas,
etc. El mantenimiento del tomógrafo y los insumos médicos cuestan una fortuna,
si los encontramos. Todo cuesta, solo que en algunos casos se notan esos costos
reflejados en una matrícula y en otros, nadie muestra cuánto cuesta. Sería
extraordinario saber cuánto le cuesta al Estado un estudiante en la Universidad
Bolivariana. Sería un buen reportaje para Ciudad CCS. Hace muchos años, desde
la UCAB se hicieron algunos ejercicios comparativos y en las universidades
públicas el costo era varias - pero varias veces - mayor que en la UCAB.
¿Sabías además, que un chucuto subsidio que se daba para becas a estudiantes
menos favorecidos económicamente, este gobierno lo eliminó? Y todo esto sin
contar que lo que verdaderamente está “desangrando a la gente” (usando tus
palabras) es la desbocada inflación que el gobierno no ha podido frenar. Lejos
de eliminar la empresa privada o pensar en expropiar la UCAB, lo que necesita
el gobierno es que existan muchas más empresas y muchas más universidades que
le ayuden a sofocar esta crisis en que estamos metidos.
Mensajes en la entrada a Parque Social. Mayo 2014 |
Esto se está haciendo largo y tengo tanto por
decirte Ander. En tu artículo también mencionaste lo que ocurrió en mayo pasado
casi a las puertas de la UCAB. A mí no me lo contaron, yo estuve allí. Aquí no
hay esa división de Antímano y la UCAB que tú quieres dibujar. Ese día, 5
pelagatos fueron los que se acercaron al puente que accede a la UCAB y déjame
decirte que si eran violentos. Unos poquitos mi estimado, pero los tiros hacen
tal ruido que le da culillo a toda una población. Ellos no representan
Antímano, pero frente a mí – pues desde el Parque Social lo vimos todo – un
tipo desenfundó su arma y la vació hacia la cerca donde estudiantes estaban
agolpados. Y no había cauchos quemados, ni pacientes en el Cardiológico
asfixiados como te contaron, pues nosotros también representamos un centro de
salud y no hubo ese inconveniente. Lo más triste ese día no fue lo que ocurrió
afuera, sino percibir en tu propia institución la polarización cuando uno de
nuestros empleados pro oficialista gritó a favor de la violencia. Fue muy
triste mi pana, ver tanta ira reflejada. ¿Pero sabes? Ese señor sigue allí
trabajando y recién ayer vi que le hicieron una entrevista en el blog de la
institución. ¿Eso acaso no es tolerancia? ¿No crees que es una demostración del
camino que estamos dispuestos a seguir los que queremos la paz?
La relación entre la UCAB y Antímano es de plena
hermandad. ¿De donde crees que son nuestros trabajadores? ¿De dónde nuestros
pacientes y beneficiarios? En tu columna dices: “La comunidad de Antímano
expresó que no quiere a la UCAB dentro de su espacio” ¿Quién lo dijo? Una
aseveración sin base sólida no solo hace un gran daño sino que te resta
credibilidad. Te puedo mencionar que el año pasado se llevó a cabo un estudio
en las 5 parroquias circunvecinas a la UCAB (Antímano, La Vega, Caricuao,
Macarao y El Paraíso del municipio Libertador) que suman más de 600.000
habitantes. Una investigación de verdad con todos los requerimientos para
arrojar datos fidedignos, de hecho, el trabajo de campo fue contratado afuera
para no hacerlo con miembros de la propia UCAB. Los resultados son totalmente
diferentes a lo que mencionas. Un dato increíble es que más de un tercio de los
vecinos de estas parroquias (de estratos C-, D y E) conocen o son usuarios
permanentes del Parque Social P. Manuel Aguirre. Ese número es mayor a la
penetración de las misiones en el mismo sector. Y no tenemos el aparataje ni la
logística gubernamental para sus programas. Y si hablamos de la calidad con que
somos percibidos, el dato es mucho más alentador. En pocas palabras, a la final
somos mucho más aliados de lo que piensas, imagínate si fuésemos cercanos en
visión y trabajo conjunto.
El Parque Social de la UCAB cuando arribó a sus 15 años sirviendo de puente entre universidad y comunidad. Caricatura cortesía de Meollo Criollo |
Bueno mi hermano, te reitero mi invitación al
Parque Social UCAB, así como al trabajo que actualmente estoy desarrollando con
la Fundación Santa Teresa en el municipio Revenga del estado Aragua, donde
afortunadamente hemos logrado coincidir lo que llamamos el PPP (Público,
Privado y Pueblo), es decir, es una vitrina que demuestra que el trabajo
conjunto da resultados. Si nos llegamos a encontrar debo advertirte que
probablemente tenga la “pinta de catire inofensivo” que describes en tu
artículo, pero mi cédula de identidad y mi pasaporte solo dice venezolano. Sí, mi pana, eso es lo rico
de ser de este país. Recuerdo que en el colegio nos hablaban de cómo se forjó
nuestra historia, de cómo el mestizaje se convirtió en el elemento
característico de nuestra venezolanidad, de cómo Venezuela ha sido siempre un
país de puertas abiertas a diferentes culturas y países. Jamás tendría por ti
ningún prejuicio por tu nombre eminentemente vasco, como el de tantos
jesuitas que dejaron sus tierras para apoyar la educación pública - recuerda que Fe y Alegría nació en la UCAB - y privada, en un país remoto.
Aquí, mi estimado Ander, todos somos pertinentes.
Un abrazo!
Bernardo Guinand Ayala
bguinand@gmail.com
24 de mayo de 2015
no tenias que escribir tanto para expresar tudesagrado por esa carta tan estupida de ese tipo, con decirle imbecil marginal todo estaba dicho.
ResponderEliminarNo Elba, hay que decir las cosas como son. Esa gente quiere destruir lo poco que queda que pueda ser independiente del gobierno, y destruir la educación de calidad. No les conviene la gente crítica, que destruya sus estupideces con hechos sólidos. Muy buen artículo. La empresa privada no sólo significa dividendos, sino también opciones, calidad y desarrollo.
ResponderEliminar